Estamos conmemorando el Tercer Aniversario del Programa de Atención Social a Familias que Habitan en Vecindades y Viviendas Precarias del Distrito Federal. El objetivo es atender a las familias más pobres de las diversas delegaciones de la ciudad. El programa va desde Cuautepec hasta la montaña de Tlalpan.
Como sabemos, hay muchos pobres en las partes altas, en zonas periféricas, pero también en delegaciones muy urbanizadas y desarrolladas como Benito Juárez, Coyoacán y Miguel Hidalgo. No debemos olvidar que deben ser atendidos por el gobierno del Distrito Federal a través de sus programas sociales.
Este programa tiene el propósito de llegar a esos lugarcitos, a esas vecindades que están escondidas entre grandes edificios porque es ahí donde hay familias muy pobres y con muchas carencias. Es en las vecindades donde encontramos muchos problemas de violencia social, familiar, adicciones, desempleo, obviamente pobreza, además de falta de servicios, desnutrición, insalubridad, entre muchos otros.
Por tales razones es importante vincular diversas acciones y servicios para llevarlos a las viviendas precarias, tales como jornadas de mastografías, talleres de prevención en adicciones, trámites para obtener el acta de nacimiento extemporánea de manera gratuita, pláticas sobre hábitos alimenticios, entregas de lentes, ropa, láminas y polines, así como sillas de ruedas, bastones, andaderas y muletas para personas con algún problema de discapacidad motriz y jornadas médicas. Además de ello, atención a través de diversos programas sociales como comedores públicos y comunitarios, y asesoría jurídica a predios donde existan problemáticas muy complejas.
Estas acciones forman parte de la política social del gobierno. Sólo en el Distrito Federal hay pensión universal de adultos mayores, seguro de desempleo, programa de beca universal en el bachillerato, comedores públicos y comunitarios, mejoramiento barrial y entrega de eniformes y útiles gratuitos en todas las escuelas.
Lo prioritario es proporcionar esta información a todas las familias y particularmente a las familias más pobres. Porque el problema número uno se llama pobreza y desigualdad social. Ese es el gran problema, hay mucha gente que incluso no sólo está en la pobreza, sino en algo que todavía es peor: la exclusión. Por eso, celebramos hoy tres años del programa de Atención social a vecindades.
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